Consejos para el cuidado de tu motor

En un vehículo es fundamental que cuides el motor, en especial porque si el motor no funciona tu coche simplemente no podrá desplazarse. Para comprar los mejores motores de segunda mano a un buen precio debes visitar el desguace de Motores DYG, puesto que allí encontrarás las mejores opciones de todas las marcas.

Pero, puede que no sepas cómo cuidar tu motor de una forma eficiente, lo que hace que sea difícil tener un gran resultado. Por este motivo, en el post del día de hoy te traigo algunos consejos que resultarán fundamentales para que puedas cuidar el motor de tu vehículo.

¿Cómo se debe cuidar el motor de tu coche?

Para que puedas conseguir la mayor durabilidad en el motor de tu vehículo, debes asegurarte de darle a tu motor unos cuidados básicos dentro de los que están:

Revisa las correas

Las correas que tiene tu motor son básicas, en especial porque se encargarán de mover las piezas del motor. Por esto, debes hacer una revisión periódica de las correas de tu motor y que así puedas determinar su estado.

En caso de que las coreas presenten grietas o que estén a punto de romperse debes asegurarte de cambiarlas de inmediato. Esto debido a que de lo contrario podrían romperse y causar graves daños a tu motor.

Mantén una buena lubricación

La lubricación es otro punto básico que debes tener en cuenta en tu motor, porque de una buena lubricación dependerá que no tengas mucha fricción. Por este motivo, debes estar midiendo el nivel de aceite por lo menos una vez al mes.

Si el nivel de aceite en tu vehículo es demasiado bajo, esto puede producir un aumento en la fricción entre las piezas lo que llevará a un mayor desgaste. Por este motivo, debes asegurarte de tener un buen nivel de aceite para evitar daños a tu motor.

Control de las RPM

Cuando vas conduciendo puedes cuidar tu motor simplemente cuidando el nivel de RPM que tengas en el motor. Los profesionales de la conducción aseguran que para que el motor tenga un rendimiento óptimo, debes asegurarte de que las RPM no pasen de las 2.500.

Este es un límite que debes aplicar siempre que estés conduciendo para verificar que puedas conseguir un gran rendimiento. Si subes demasiado las RPM esto podría causar que se produzca un desgaste innecesario de tu motor y se aumentará el consumo de gasolina.